No podemos negar que nos encanta ese primer soplo helado que nos roza la cara al salir de casa, anunciando la llegada del invierno. Pero nuestra piel no siente la misma emoción. Ese aíre frío trae consigo a muchos de sus enemigos: tirantez, descamación, resequedad y, en muchos casos, irritación. Pero no caigas en pánico, aquí compartimos nuestra guía de cuidado ante las bajas temperaturas.
AAmamos estos días de noviembre en los que las temperaturas comienzan a descender, el aire se vuelve más fresco y las mañanas más acogedoras. ¡Los primeros aires navideños se sienten ya! No podemos negar que hay una magia especial en esta época del año, una mezcla de nostalgia y emoción que nos invita a sacar los sweaters, estolas y las prendas que no podemos usar el resto de año.
Pero mientras celebramos este cambio de estación, la piel no siempre manifiesta el mismo encanto. De forma casi automática, en cuanto bajan las temperaturas, la piel del rostro empieza a enfrentarse a un verdadero reto.
El aire frío contiene menos humedad, y eso hace que la piel pierda agua mucho más rápido. ¿El resultado? Tirantez, descamación, sequedad y, en muchos casos, irritación. Además, cuando hace frío, nuestros vasos sanguíneos se contraen para conservar calor. Esto reduce la circulación en la piel y puede hacer que se vea más opaca, sensible y fatigada. Si a eso le sumamos los cambios bruscos entre el interior y el exterior, donde usualmente nos movemos, tenemos la receta perfecta para el enrojecimiento y la incomodidad.
Definitivamente con la llegada del invierno, las necesidades de la piel cambian. La barrera cutánea —esa capa protectora que retiene humedad y bloquea agresiones externas— se debilita más rápido. Si no reforzamos sus defensas, nuestra hidratante diaria puede quedarse corta.
La belleza también necesita abrigo, y antes que el viento, el aire acondicionado y el frío pasen factura, pondremos en marcha un plan de protección para lucir radiantes en la época más hermosa y cálida del año. Con los cuidados adecuados, tu piel puede mantenerse luminosa, suave y protegida incluso en los días más fríos. Aquí tienes una guía práctica para lograrlo:
1. Elige limpiadores suaves. El limpiador perfecto es suave e hidratante. La limpieza es el primer paso de cualquier rutina, y en invierno es importante que no elimine los aceites naturales de la piel. Evita aquellos productos que contienen alcohol y dejan la piel tirante. Prefiere los cremosos o enriquecidos con agentes humectantes y elaborados con fórmulas hidratantes que respetan la barrera natural. Al momento de lavarte el rostro evita el agua caliente y recuerda, un buen limpiador debe hidratar, no resecar.
Te recomendamos: Re-Nutriv Hydrating Foam Cleanser de Estée Lauder, espuma limpiadora que purifica la piel mientras la hidrata profundamente. Su fórmula enriquecida elimina las impurezas y deja la piel suave, fresca y revitalizada; Total Cleansing Oil de Clarins , limpia profundamente sin resecar la piel, manteniendo su equilibrio natural; Desmaquillante en Agua Micelar 2 en 1 Pure Algue de Yves Rocher , enriquecido con extracto de alga, elimina eficazmente el maquillaje y las impurezas mientras revitaliza y refresca la piel.
2. Usa un tónico hidratante. Aplica un tónico hidratante con movimientos suaves de presión. Evita los astringentes o con alcohol, ya que pueden resecar la piel.
Te recomendamos: Tónico Hidratante de Clarins, restaura la microbiota cutánea e hidrata la piel, dejándola suave y fresca; Tonique Confort de Lancôme, hidrata y calma la piel seca, mientras elimina el maquillaje y las impurezas de su superficie. Enriquecido con extracto de almendra y miel para dejar la piel limpia, suave y confortable; Pure-Fect Skin Lotion de Biotherm, loción astringente que afina la piel al milímetro con una elevada eficacia. La piel parece purificada y los poros se reducen.
3. Hidrátate en capas. En tu rutina diaria, aplica primero un serum con ingredientes como ácido hialurónico, excelente para retener agua en la piel. A continuación, aplica un contorno de ojos, seguido de una crema hidratante que se ajuste a tu tipo de piel. Si necesitas hidratación extra, considera aplicar una segunda capa fina de crema o una más densa. Además de ácido hialurónico, asegúrate de elegir productos que incluyan en sus fórmulas aceite de jojoba, ideal para sellar la hidratación sin dejar sensación grasa o ácido láctico, que equilibra exfoliación suave e hidratación.
Te recomendamos: Advanced Génifique Sensitive Face Anti-Aging Serum de Lancôme está enriquecido con fracciones prebióticas y probióticas que fortalece la barrera de la piel, calma y reduce visiblemente el enrojecimiento y otras imperfecciones; Advanced Night Repair Eye Cream Reafirma y Esculpe de Estée Lauder es una crema contorno de ojos avanzada que actúa en las cuatro dimensiones del área ocular: ojeras, párpados, líneas finas y esquinas internas; Crema Antiedad Reafirmante Extra-Firming de Clarins, formulada para aumentar las reservas de colágeno en la piel, ayudando a mejorar su firmeza y elasticidad; Smart Clinical Repair ™ Rich Antiarrugas de Clinique, crema ultranutritiva que reduce visiblemente las líneas y arrugas, dejando una piel más suave y joven.
4. Sella la hidratación con aceites Si tu tipo de piel lo permite, incluye un aceite facial en tu rutina diaria para evitar que el frío reste más humedad a la piel.
Te recomendamos: Tinted Oleo-Serum de Clarins, tinte en suero nutritivo para la piel, enriquecido con pigmentos minerales puros y un trío de aceites de escualano vegetal, jojoba orgánico y de avellana que ayuda a reforzar la barrera de la piel y proporciona una hidratación continua; Riche Serum Aceite Oleo-infusión de Rosas de Yves Rocher, aporta confort y flexibilidad. Día tras día, la piel se repara, se nutre intensamente, las arrugas se alisan y la piel queda luminosa; CR Blue Orchid Face Treatment Oil de Clarins, tratamiento intensivo para pieles deshidratadas, que aporta vitalidad, frescura y nutrición profunda. Su fórmula revitaliza y tonifica la piel, ayudando a prevenir la deshidratación y aporta suavidad.
5. No prescindas del protector solar. Aunque el sol se esconda, los rayos UV siguen ahí: en el exterior, en la pantalla del teléfono, en la computadora o en las luces de las oficinas. El protector solar continúa siendo imprescindible.
Te recomendamos: Crema Solar Toque Seco para rostro SPF50+ de Clarins, crema para el rostro SPF 50+ hidratante con una textura fina y fundente que ofrece un tacto seco con acabado mate. Es resistente al agua y no irrita los ojos; Skin Perfecto Radiance Perfecting UV Stick SPF 50+ PA++++ de Givenchy, crema protectora en barra que sirve para retocar la piel en cualquier momento y en cualquier lugar, ayuda a brinda protección contra los rayos UV y mostrar una piel visiblemente refinada; UV Plus SPF 50 Traslucent 30 ml de Clarins, defiende la piel frente a cinco contaminantes presentes en nuestro día a día: atmosféricos, de interior, polen, luz azul y fotocontaminación.
6. No olvides los labios y el contorno. Son las zonas más delicadas y las primeras en presentar resequedad. El uso continuo de un bálsamo protector es obligatorio. Asegúrate además de aplicar hidratante en las orejas, cuello y manos.
Te recomendamos: Moisture Surge™ Hydro-Plump de Clinique, tratamiento multi-acción que humecta, nutre y prepara los labios dejándolos suaves e hidratados; MAC Bálsamo labial Squirt Voluminizador, barra no pegajosa aporta color vibrante con acabado brillante. Además, está enriquecida con aceite de coco, manteca de karité y aceite de aguacate para nutrir y acondicionar los labios; Instant Light Lip Perfector de Clarins, bálsamo con color y brillo que nutre, hidrata y realza los labios con un efecto volumen natural. Su fórmula ligera proporciona un acabado suave y radiante.
7. Protege también la piel de tu cuerpo. El clima frío es un desafío para la piel en general, por eso es importante aplicar crema hidratante de pies a cabeza. Evita ducharte con agua muy caliente o muy fría. Lo ideal es el agua tibia. Para mantener la piel suave y flexible, aplica la crema cuando aún esté ligeramente húmeda, tras la ducha. Esto ayuda a retener la humedad. Aplica nuevamente antes de dormir.
Te recomendamos: Body Smoothing Moisture Milk de Clarins, leche corporal ligera e hidratante que suaviza, calma e hidrata durante 48 horas. Posee una textura ligera y fundente que se desliza sobre la piel para aportarle confort, flexibilidad y suavidad al instante; Crema Corporal de Argán y Pétalos de Rosa de Yves Rocher, especialmente diseñada para pieles secas, esta crema está enriquecida con aceite de argán, conocido por sus propiedades nutritivas, y extracto de pétalos de rosa, que aportan una sensación de confort y frescura en cada aplicación; Lait Corporel SPB de Biotherm, leche corporal diaria deliciosamente suave y con un frescor increíble que repara la piel escamosa y barrera protectora de la piel mientras protege su elasticidad natural.
